BLACK IS BACK 2012. Sensacional Rhythm´N´ Soul Weekender.
El soul es la
lírica sentimental de Levis Stubbs cantando “Reach Out I’ll Be There”, el alma
y la garganta de Otis Redding balanceando el mensaje de “Respect”, el desgarro
febril de Ann Peebles derramando lágrimas sobre las estrofas de “I Can’t Stand
the Rain”, la dulce compasión de Curtis Mayfield y The Impressions ,
transparentes en la melodía de “People Get Ready”, la rabia y el descaro de
Swamp Dogg gritando “God Bless America for What”. Emociones telúricas,
estribillos instantáneos, canciones jubilosas, la música memorable que sirvió
de banda sonora al despertar de la conciencia afroamericana en los años 60 y 70
del siglo pasado, los sonidos más auténticos, sinceros y espontáneos de la
historia del pop.
Por eso, el soul
vuelve una y otra a nuestras vidas, renace en voces jóvenes que no vivieron su
alumbramiento y comparte su efervescencia con las viejas glorias aún en activo.
Ese espíritu de encuentro ilumina el cartel de Black is Black, un certamen festivo, como los antiguos northern soul weekends, que nace con
vocación sincretista y un profundo amor y respeto por las tradiciones, la épica
y la estética de la música popular negra, y que en su primera edición cuenta
con nombres legendarios como The Impressions (¡en su primera visita a España!,
sin Curtis Mayfield, claro, pero con dos de los miembros originales del grupo,
Fred Cash y Sam Gooden), jóvenes
vocalistas blancos que apuestan por la renovación del soul desde distintas
ópticas, como el británico James Hunter, ya un gigante, o el norteamericano EliPaperboy Reed, entusiastas del
R&B y el garage como Lisa Kekaula, vocalista de The Bellrays,
y artistas españoles devotos del
género, como los granadinos Al Supersonic & The Teenagers o los madrileños
Juan Zelada, Watch Out, Freedonia y The Faith Keepers y La Mula.
Benditas sean iniciativas como ésta, que
desbrozan laberintos estilísticos y conducen al aficonado al genuino cruce de
caminos donde la música del alma se encontró con las pasiones más carnales.
Disfrutémoslas como si hubiéramos crecido en la Beale Steet de Memphis
o en un suburbio negro de Alabama. En Madrid, el 26 y el 27 de mayo, black is black.